Sí, ya sé: “la evaluación no son solo exámenes”. Totalmente de acuerdo. Pero también es cierto que los cuestionarios y las pruebas siguen siendo súper útiles cuando quieres saber rápido qué tanto se apropió el estudiante de un contenido. El problema no es el instrumento… es cuando lo hacemos al “hay que poner examen”. 

¿Qué es?

Los cuestionarios y pruebas son instrumentos de evaluación estructurados que presentan al estudiante una serie de reactivos (preguntas, ejercicios, situaciones) para que responda y, con base en eso, el docente juzgue el grado de dominio de un tema.

Pueden ser:

• Objetivos (opción múltiple, V/F, completar)

• Semiestructurados (respuesta corta)

• Abiertos (ensayo, problema complejo)

Lo bueno es que permiten comparar, diagnosticar y registrar fácilmente.

¿Qué podemos evaluar con cuestionarios y pruebas?

Más de lo que parece, si los diseñas bien:

• Conocimientos específicos (definiciones, conceptos, fechas, fórmulas)

• Comprensión (aplicar una regla, identificar ideas principales)

• Procedimientos (resolver operaciones, pasos de un método)

• Lectura (comprensión literal e inferencial con ítems)

• Diagnóstico inicial (¿qué tanto sabe antes de empezar la unidad?)

• Salida (¿qué se llevó después de la secuencia?)

• Autoevaluación rápida (el alumno responde y revisa)

Y si usas reactivos de contexto (problemas, situaciones escolares), también puedes evaluar pensamiento crítico… sí, con pruebas.

Cómo crear un buen cuestionario o prueba

1. Empieza por el aprendizaje esperado
   Nada de “a ver qué se me ocurre”. Cada pregunta debe responder a lo que pusiste en la planeación.

2. Define el tipo de reactivos

   • Diagnóstico → reactivos sencillos, de reconocimiento.

   • Formativa → reactivos que muestren errores comunes.

   • Sumativa → combinación de objetivo + abierto.

3. Redacta reactivos claros

   • Una sola idea por pregunta.

   • Usa vocabulario del nivel de tus alumnos.

   • Evita distractores “malvados” que no aportan.

4. Incluye distintos niveles de complejidad

   • 30% recuerdo

   • 40% comprensión

   • 30% aplicación
     (Ajusta según tu grupo.)

5. Prepara la clave de respuestas o criterios de valoración
   Para objetivos: clave.
   Para abiertos: mini rúbrica (qué debe contener la respuesta).

6. Haz una versión para imprimir o digital
   Así no lo vuelves a hacer el siguiente ciclo, solo lo actualizas.

Cómo crearla con IA 🤖

Aquí la IA sí es tu aliada porque generar reactivos es repetitivo.

Prompt sugerido (básico):

“Genera un cuestionario de 10 preguntas de opción múltiple sobre ___ (tema) para alumnos de ___ (grado). Cada pregunta debe tener 4 opciones y señala la respuesta correcta. Usa lenguaje de México.”

Prompt para evaluación formativa:

“Crea 8 preguntas de opción múltiple sobre ___ que incluyan errores comunes de los alumnos en las opciones incorrectas. Explica por qué la opción correcta es la correcta.”

Prompt para problemas o casos:

“Formula 3 situaciones problema de la vida escolar relacionadas con ___ para que los alumnos apliquen el contenido. Incluye la respuesta.”

Después tú:

• Quitas las que están muy largas.

• Ajustas vocabulario.

• Cambias contexto por uno más cercano a tu zona.

Si lo subes a Forms / Classroom / Moodle, ya te califica solo y te genera estadísticas. 🥳